Una bella experiencia!

Desde el pasado día 20 de Julio, mi hijo Erick está participando en el Programa de Pasantía para Hijos de Empleados de la empresa para la cual trabajo y sinceramente la experiencia ha sido más que gratificante, no sólo para él sino para mí también.

He visto a mi hijo desenvolverse con tanta fluidez, con tan buen carácter y responsabilidad que no me cabe la menor duda de que su comportamiento es solo un avance a todo lo que mi vástago ofrecerá cuando le toque asumir un rol definitivo cuando ya sea adulto.

Me siento una madre privilegiada y con la satisfacción del deber cumplido cuando mis compañeros se me acercan para hablarme de él, de algunas de sus ocurrencias, de su voz de "locutor", su formalidad, su hombría, su educación, sus valores y su disposición positiva hacía sus tareas.

Erick estará desempeñando algunas funciones de utilidad en el Departamento de Ventas hasta el 20 de Agosto y mientras tanto también está aprendiendo a ser manejado por Jefas, involucrándose en actividades, siendo proactivo y colaborador en lo que necesiten, conociendo el ambiente laboral y descubriendo poco a poco la base donde se apoya la empresa que Dios ha utilizado durante estos últimos 12 años de mi vida para proveerles tanto a él como a Daniel el sustento de sus necesidades, comida, salud, recreación, educación, estabilidad económica y hasta emocional.

No ha sido necesario esperar esta oportunidad ni la retroalimentación por parte de mis compañeros de trabajo para que me dé cuenta de todo el potencial de Erick. Desde hace mucho conozco y confío que su personalidad extrovertida, dinámica, amable y chispeante bien dirigida, lo llevará por un camino de éxito y que muchas veces más me hará sentir una madre ¡MUY ORGULLOSA!

Felicidades hijo!!

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