31 agosto, 2013

Caramelo

Los pajaritos se fueron y se han quedado una Gata y su cría viviendo practicamente en mi patio, frecuentando mi terraza y robándonos el corazón poco a poco.

Les presento a "Caramelo", la cría.  Así lo bautizó mi amiga Ianko Selig luego de ver su tierna carita.

Fotos: Angela Guichardo/Right Reserved.




28 agosto, 2013

El responsable...

Los pajaritos no han vuelto a comer a casa. Los extraño y por más que he preparado su comida, no han regresado por ella, todo debido a este señor que se encargó de espantarlos... Se ha mudado a casa sin avisar.



23 agosto, 2013

La luna, los gatos y yo...


¿Se han fijado lo hermosa que está la luna durante estos días y noche? Anoche mientras hacía el intento de fotografiarla, aclaro lo de intento; y es que cuando no se tiene el equipo adecuado para ello, entonces se convierte en un reto, en un reiterativo ensayo de prueba y error el tratar de captar con cierta nitidez los detalles de la luna. Lo bueno es que la pasión se impone y el deseo por estar lo más cerca de ella sale airoso aun sin las herramientas.

Yo buscaba la magia de la luna a través de mi lente y mientras, unos gatos se acercaban a mi casa con sus ojos deslumbrantes en la noche. Uno, visitante frecuente por el éxito de encontrar comida, no dudo en ir a saludarme y pretender rascarse entre las campanas de mis pantalones, el otro no tenía la confianza de acercarse y solo me observaba desde donde podía sentirse seguro. Confieso que la mirada de este era intimidante, contrario a la mía que disimulaba tener todo controlado, pero más contraria a la del otro que buscaba mimo en mis tobillos.

Estas fueron entre otras, las fotos que le hice a mi amiga la luna y al felino que me miraba. Pueden hacer clic en las imágenes para verlas más grandes.

Mi luna y mi sonajero
Somebody is watching


Inside of the red planet








20 agosto, 2013

17 agosto, 2013

11 agosto, 2013

Mi nuevo vecino...



Que lección tan incentivadora es ver trabajar a las aves. Su labor intensa de luchar contra el día a día y las nuevas aventuras que les depara el clima.

Persistente y hasta agotadora, pero más que gratificante fue mi experiencia de hoy que comenzó aproximandamente a las 6:30 de la mañana para observar el nuevo inquilino que ha decidido construir su casa en mi matica de Guayaba.

La primera vez que vi el nido, aun no podía llamársele así, pues eran a penas una cuantas basuritas atrapadas en un rama.

En solo un par de días ya tiene forma de "hogar", luce resistente y calentito. Acogedor y propicio para recibir al resto de la familia, después de todo, solo por ellos se trabaja con tanto entusiamos.

Esta avecilla estuvo por horas enfocada en levantar su refugio, obvió la comida servida en mi terraza y por docenas de veces salió a buscar "paredes" para su casa. 

Iba y volvía. Cargaba, depositaba y tejía.  Horas después vino a comer, pero tan rápido que esa foto lamentablente no la pude hacer.

Estoy feliz con mi nuevo vecino.  Estos son los bellos detalles que disfruto a plenitud.








Foto y video: Angela Guichardo

 ♥

04 agosto, 2013



Hace días coloqué comida en mi terraza para acercar a los pajaritos, para crear costumbre en ellos de visitarme sin temor a ser agredidos y para que tenga alimento seguro cada vez que vengan. 

Poco a poco han ido llegando unos cuantos, supongo que mientras estoy trabajando o cuando hay menos ruido en la casa, aprovechan para venir con más frecuencia a comer del alpiste, las migas de pan y el agua que día a día con amor les sirvo.

Me he encontrado su grata visita varias veces, y es algo que me llena de regocijo porque me encantan y verlos llegar a casa y posarse en las rejas es una bellísima bendición.  

Esta es la primera foto que logro tomarle a uno. Si ven una viñeta oscura en el borde es porque estaba detrás de la malla de la puerta, escondidita y tratando de no espantar a mi hermoso visitante. 

Amo la naturaleza, especialmente las aves, las cuales siempre deben ser libres, volar en libertad para lo cual fueron hechas.