24 enero, 2014

39 Primaveras y unos tantos gobiernos...


 Estábamos reunidos en la galería de la casa materna cuando mi padre salió y nos retó a adivinar cuántos años tenía la camisa que nos mostraba en la percha. 

Mi padre junto a su reliquia
No teníamos idea alguna, pero casi de inmediato nos dio una pista. Dijo que esta era una de las camisas que se usaba como uniforme en la antigua Fábrica Dominicana de Cemento que operó por muchos años como empresa del estado. Mi padre trabajó allí por un largo periodo hasta que fue jubilado, por lo que imaginamos que su atuendo es prácticamente una "joya" para él, una verdadera reliquia.

Nos contó que la administración de la empresa les proporcionaba el uniforme cada cierto tiempo, cuatro juegos en total y que esa camisa en particular, no la usó, sino que siempre permaneció en el closet desde el año 1975, es decir que dicha prenda ha sobrevivido a 39 primaveras y varios gobiernos! 

Mi hermano Julio Armando (Yuyo)
Posteriormente la "Cementera" cerró, pero los recuerdos de mi papá, de cómo logró entrar allí, de la persona que lo ayudó a conseguir el empleo, la experiencia que adquirió durante tantos años y la responsabilidad con la que asumió su labor, el horario, las condiciones que aunque forzosas y poco remuneradas, le permitían ganarse el sustento de su familia. Cada detalle en su memoria sigue siendo motivo de orgullo y satisfacción por haber sido parte de esa historia.

Cuando papi nos narra sus vivencias en la fábrica, siempre tiene el mismo entusiasmo, el mismo amor y sobre todo, le brota el sentimiento de agradecimiento hacia aquellos que fueron responsables de que gracias a un trabajo digno, él pudiera ofrecer a su esposa e hijos, el pan que nunca faltó en nuestra mesa cada día.



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