02 abril, 2010

Heroína...

Con esta imagen me fluyen muchos sentimientos, pero los acunaré en mi interior para cuando llegue el momento dejarlos brotar y estampar con ella las experiencias superadas a fuerza de voluntad.

Les cuento la historia de mi flor marchita. Subiendo por la carretera de Constanza, entré a la Capilla que allí existe en honor a la Virgen. Cuando la abandonaba e intentaba abordar el vehículo en el cual transitaba, un mágico detalle volteó mi mirada hacía el tanque oxidado de la basura y allí estaba ella, una flor que parecía una heroína.

Algún feligrés cambió por nuevas y frescas flores el altar de la virgen, y como es a veces de maravilloso el destino, tiro las viejas en normal descuido, pero una sola se resistió a perderse en el oscuro fondo y su tallo y pétalos cansados se sujetaron muy fuerte del borde de su infierno.

Parecía no querer desprenderse de la vida y respiraba moribunda el último aliento de aire fresco y sereno del envidiable lugar donde probablemente creció. Era un adiós lleno de agradecimiento por todo lo dado del aquel hermoso y verde escenario.

El coraje de esta flor simboliza y es para reconocimiento de todos aquellos que la vida no les ha sido color rosa, pero que se esfuerzan en sobrevivir a ello, aun con las variadas pinceladas que como trazos deposita el artista en su lienzo.


5 comentarios:

Héctor Emilio (Motika) dijo...

Excelente reflexión.

Esperaré con ansias la otra historia cuando la superes "a fuerza de voluntad". Me dejaste con todas las ganas de leerla.

jarielcamilo dijo...

Tu relato me recuerda algo que una vez me impresionó de mis clases de biología en el Instituto Politécnico Loyola; más bien me las dijo mi tío, "Negro" Quiñones, mientras hacía mi tarea: "Una de las principales tareas de todo ser y toda especie es mantenerse vivo".

Por esta razón la naturaleza está llena de sobrevivientes. Solo hace falta un ojo audaz como el tuyo para que se les reconozca. Desde el niño que mendiga, hasta todo el planeta que ante el atentado de la humanidad se remueve buscando el equilibrio, hay una amplio rango de quienes buscan subsistir.

Al mismo tiempo es una demencia total que el ser humano no haya entendido aun que atentar contra el medio ambiente lo hace violar el citado principio básico de la biología que antes dije. Antes ese estado de irreflexión es que tenemos que aprender de tu rosa, Angela, y aferrarnos a tratar de entrar en razón a aquellos cuyos intereses o ignorancia, los han enceguecidos.

José Ariel!

Pedro Genaro dijo...

Qué hermosa reflexión Angie! La foto efectivamente conecta con tu inspiración. Gracias por conectarnos a nosotros también.

Belén Manrique Castaño dijo...

Excelente foto,igual que tu reflexión.
Feliz fin de semsns santa

Juan Carlos Porcella dijo...

Te felicito por tan linda reflexión!!!!!!!!!!! Sabes escribir muy bien.