29 mayo, 2011

El hijo de la que vende las flores...


Entre pétalos de Girasoles me levanta,
del colchón de Azucenas y Tulipanes que prepara.
En la mesa, Amapolas y Gladiolos acompañan
los otros dos Claveles que en su vientre retoñan

Como cada mañana en que he vivido,
acoteja en un nidal de Hiedras, un bidón en su cabeza.
En ella un jardín de flores frescas
que destilan esperanzas del color de las Violetas

Lleva a su cuesta Hortensias, Rosas y Margaritas,
perfumando el camino que la aleja.
Toca puertas y ofrece Lirios, Anémonas y Camelias
y con ellas también, reparte su sonrisa de Pompones y Caléndulas.

Recorre quietas y agitadas carreteras
y en la escondida del Sol, el bidón apoya en sus caderas.
Los Pétalos que dejó atrás en la mañana, acolchan sus pies y alma cansada
Y en su lejano pregón de Jazmín y Agapantos, ríe mi alma cuando regresa.


Angela Guichardo

1 comentario:

Darío Martínez Batlle dijo...

No son suficientemente densas tus fotos, para que también escribas tan emotivamente???