Que linda mañana!

Hoy domingo amanecí mucho mejor y sin el horrible dolor de estómago que me estaba acabando la existencia.

Aprovechando mi regreso a la vida, me levanté con mucho ánimo y me decidí a asistir a una actividad que sabía me iba a encantar: una bellísima exposición de Orquídeas organizado por la Sociedad Dominicana de Orquideología que se estaba realizando hasta el día de hoy en el Jardín Botánico Nacional.

Hace varios días que estaba pensando en ir al botánico, primero por las flores y el paisaje y segundo por mi otra pasión que son las fotos. Allí puedo practicar con libertad y poner a prueba la capacidad de mi humilde cámara y mi creciente interés por la fotografía.

No les puedo explicar con palabras la belleza de estas plantas y flores, ojalá las fotos fueran justas en un cien por ciento para que puedan apreciar la hermosura de ellas. Tenían ventas de Orquídeas a MUY buen precio, lamento no haber llevado suficiente dinero en efectivo porque de lo contrario hubiera comprado varias plantitas, que fallo andar solo atento a la tarjeta cash.

Llegué al parque a eso de las 9:45am, allí comí, tomé el tren, que dicho sea de paso no me permitió quedarme en el Jardín Japonés por la gran cantidad de gente que estaba visitando el Botánico, así que dí un par de vueltas mas admirando las Lilas y cualquier florcita que llamara mi atención. Luego comí y me fui caminando al japonés porque de ninguna manera me iría de ese lugar sin tomar fotos allí.

Que rico es hacer lo que se quiere cuando lo deseas!. Busqué la sombra de un árbol de Gina y allí me acosté. Puse mi cartera de almohada y contemplé el cielo, disfruté del viento y maravilloso sonido de la naturaleza y las aves.

Chequeen algunas de las fotos...