Que pase Mayo ya!

Esta contienda electoral que se concretará el próximo 16 de Mayo es una de las mas esperadas por mi, pero mi verdadero deseo es que por amor a Dios ya termine todo este bombardeo político que me fatiga y me pone de mal humor.

La campaña del PLD y el presidente Leonel me recuerdan mas bien una secta religiosa o el renacimiento de la época de un tirano que se alimenta de las alabanzas y desmedidos comentarios lambonísticos del clientelismo político.

Parece que a todos le han lavado el cerebro y andan como corderos al matadero, todo el mundo está con "el progreso". Nunca en mi vida había visto tanta gente de otros partidos cambiándose para este, tanta gente que en gobiernos pasados tuvieron sus cargos y hoy como están fuera y sin esperanzas de volver a tener el chequecito se les ha olvidado la moral y uno los ve hasta tirando unos vergonzosos discursos contando las excusas que les hacen apoyar al candidato reeleccionista,cuantos sinvergüenzas!.

Yo no se cuantos cargos y cuantas botellas tendrán que crear para favorecer a toda esta gente que anda detrás del presidente. A esa gente hay que darle cuartos, hay muchos de ellos que se les nota la olla y que lo único que quieren es asegurar un nombramiento.

Admiro la perseverancia del MVP, del presidente de los pobres, tal parece que la gente no quiere ni pelota ni mucho menos que le llamen pobres. Quizás son unos jodidos progresistas cuya hambre (todo tipo de hambre) los ha dejado locos, ciegos, sordomudos, torpes, trastes y testarudos (como dice shakira).

Los más recientes actos que celebran en honor a Leonel me recuerdan tanto al verdugo aquel, al benefactor, al jefe. Ojalá nuestra república no se convierta en otra "Ciudad Trujillo", porque el presidente y sus escuaces se han vueltos adictos al poder.

Ojalá no existieran los políticos, ojalá este país hubiera tenido otra historia, otra forma de iniciarse frente a los ojos del mundo, ojalá no nos hubiesen "descubierto" los Españoles, ojalá fuéramos todos tainos, ojalá no hubiera metro. Compartiríamos la Isla, sin afiches de propagandas políticas, sin corruptos, sin discursos, sin tantas complicaciones.