02 diciembre, 2008

De Tijuana para los Dominicanos...


De manera improvisada me motivé a ir al concierto de Julieta Venegas, sabía de antemano de su presentación en el país, pero por compromisos que creí tener para esa fecha no hice los planes de lugar.

Se pospuso la actividad de ayer lunes y de inmediato recordé lo mucho que deseaba ver a esta Mexicanita cuyo anzuelo principal y que me atrae hacía ella es esa especie de “zanganada” que aparenta.

Su sencillez fue una de las características que mas llamó mi atención la primera vez que conocí de ella en el disco Unplugged de Diego Torres, donde interpreta con el Argentino, dos temas que fueron de mi total agrado así como el resto del CD.

Aunque la no muy comercial artista no es tan conocida en el país, las boletas escasearon el mismo día de la función y la verdad es que Lissette y yo fuimos afortunadas de comprar las últimas dos que quedaban en Movie Max y con una fila detrás.

El concierto inició una hora después de lo establecido (como casi todos), no recuerdo el nombre de los teloneros que abrieron el concierto, que pena que por ser desconocidos y locales, no se les hace una presentación digna para que la gente sepa a quienes está escuchando y cuales son los talentos nuevos que surgen.

La banda de la intérprete de “Dime Si” apareció en escena y los aplausos y la exaltación de los fans no hizo esperar hasta que salió la Venegas como siempre con ese aire de ingenuidad, infantilismo e “insipidismo”, pero tan natural que hasta le queda bien!, ataviada en un trajecito rosado muy a lo “ella”.

Aunque los dos primeros temas que interpretó eran por mi conocidos, no me emocionaron tanto porque los cantó en un ritmo mas lento a lo normal, pero en lo adelante el concierto se fue acalorando y la comenzamos a corear y acompañar a la artista con las palmas.

Esta chica merece ser admirada, sobresale de ella una singular simpatía en complicidad con lo humano y humilde. Excelente músico. Ejecuta con probada facilidad diferentes instrumentos musicales que varía conforme el desarrollo de su show.

Julieta se “despidió” de nosotros con una de sus canciones mas populares “Me Voy” y fue un simulacro de una despedida con el público, pero al finalizar la gente quedó sedienta de seguir disfrutando de ella, por lo que de pie todos, comenzamos a aplaudir hasta lograr que la artista volviera al escenario complaciéndonos con otras interpretaciones que dieron fin al espectáculo.

Lissette y yo nos fuimos con la intención de cenar en algún lugar, rondaban las 11:05 de la noche y decidimos ir a la zona colonial a un lugar muy acogedor llamado Sagafredo, donde había muchos jóvenes en pleno apogeo.

Lamentablemente no pude disfrutar al máximo de lo últimos minutos de la noche, el ambiente y de mi malograda cena ya que cuando salíamos del Hotel Jaragua empecé a sentir unas molestias en mi estómago y el riñón izquierdo que por lo general es después del corazón, el órgano mas sensible que tengo, gracias a una herencia genética que me produce piedras.

Regresamos cada una a sus casas felices y contentas del buen rato, tarareanado las canciones entre comentarios y buenas críticas. Al final con el dulce sabor de cuando se disfruta al máximo de lo que nos gusta hacer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

jejeje que bien que la hayas pasado muy bien angie!!!
Me ha encantado el nuevo look de tu blog!!! esta bellísimo!!