Recuerdan como quedaron mis cabellos luego del triunfo de las águilas? Bueno! La verdad es que parecía una gallina matada a escobazos! Así que luego de haber dormido unas escasas horas, fuimos al salón… pero no a cualquier salón!... sino al de la madre del famoso lanzador de grandes ligas y de mi equipo José “el mambo” Lima que queda justo al lado de su hermosa residencia.
Estar en Santiago para mi es una sensación maravillosa por varias razones, entre ellas es estar en la ciudad de mi equipo, donde la mayoría de banderas que veo son amarillas, gorras, gente con camisetas de AC y hasta nombre de negocios alusivos al conjunto mamey. Es un ambiente que me envuelve y me mece en el nido aguilucho. Así que ir específicamente a este salón (actividad necesaria pero que odio pasar varias horas allí)era como continuar con esa magia que estaba viviendo desde el pasado viernes 25.
Miraba cada detalle del lugar con discreción,se escuchaba de fondo el merengue "Cuídate que no te pique una Cacata", reconocí a la hermana y hermano de Lima por los inconfundibles rasgos físicos. No me aguanté en preguntarles si ya él sabía de nuestro triunfo y qué había dicho al respecto. Estaba enterado desde esa misma noche porque prácticamente le narraron la última entrada. No era para menos que estuviera contento luego del resultado y que quisiera estar en Santiago, pero el pelotero se encuentra en Korea donde fue contratado para lanzar.
No puedo negar que estas cosas por simples que ustedes lo vean, por tontas que parezcan, para mi significan y me emocionan mucho. Yo siento que mi vida está dividida en varias partes y una de ellas es mi sentimiento aguilucho que ocupa una gran extensión de mi corazón.
Una vez que fui atendida (por cierto muy bien), su madre me concedió varias fotos. Para mi sorpresa me llevó a otro cuarto donde tienen enmarcados, atuendos significativos de algunos partidos en los que Lima ha salido victorioso gracias a su talento.
Lo que más me impresiona de esta gente Cibaeña y en particular observando esta familia, es la humildad con la cual tratan a los demás, como a pesar del lujo que les rodea mantienen sus pies firmes en la tierra. Ellos vinieron de abajo y sabemos que el disfrutar de lo que hoy tienen les ha costado mucho esfuerzo y sacrificio y es eso que los hace vivir con esa dignidad.
Puede que Lima hoy tenga una cuenta de banco con los millones de Chanflín, pero los valores, la crianza recibida de sus padres, su peculiar personalidad que le adorna de hombre carismático, alegre y espontáneo harán que ni la fama ni los recursos materiales le hagan sentirse superior a la gente que lo admira y le sigue en cada lanzamiento, en cada merengue con mambo o en cada mueca que provoque el enojo de un liceysta ponchado por el brazo de nuestra querida Cacata.
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